“La flamante incorporación al gabinete nacional de Roberto Feletti, ex presidente del Banco Ciudad y ex secretario de Hacienda del municipio de La Matanza hace conjeturar que, al equipo de Juan Manzur, se agrega un intendente como Fernando Espinoza, que se caracteriza por la precarización laboral regional».
Así, con contundencia, el secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales de Vicente López, Victorio Pirillo, se refirió al rumbo del gobierno de Alberto Fernández tras la derrota electoral y los cambios en el gabinete.
El titular del STMVL expresó que Espinoza “es en sí un anónimo más entre tantos famosos que lo son momentáneamente a fuerza de malas noticias y propagandas rentadas que solo buscan cambiar la legislación que no le autoriza su reelección. A esto se le agrega el intocable equipo económico que nadie puede cuestionar, que tranquilamente podría llevarnos -sin debate alguno- camino a un Plan Austral».
En ese sentido destacó que “la incorporación de Juan Manzur pone en jaque de igual forma al Gobierno, ya que irrita principalmente a grupos feministas que reprochan, entre otras cosas, el caso de Lucía, la niña de 11 años violada y obligada a parir por la desaprobación de un régimen político antiderechos y misógino que le negó bárbaramente el acceso a la interrupción legal de su embarazo en Tucumán”.
En sintonía con los demás cambios en el Gabinete, fue el turno del nuevo ministro de Seguridad, vapuleado en los últimos días por la oposición y por gran parte de la sociedad por el caso Nik.
“Aníbal Fernández, quien saliera redimido de muchas controversias, sigue incólume, pese a todo, y sostiene una mayoritaria resistencia social que no lo ha perdonado a pesar de su vasta experiencia. Sería más útil en este momento para el golpeado gobierno en terceras fila como armador de equipos que en primera como hace poco fuera nombrado”, agregó Pirillo.
En esa línea subrayó: “Lo cierto es que estos y tantos actores más que ya sumó la administración nacional y otros de los que escuchan consejos sin ningún éxito visible, dan una idea de empalizada, de muralla y todo lo que se construye en tal sentido es para defenderse, encerrarse y no para rehacerse o recuperar terreno perdido. Así, el Gobierno tiene muchos estilos y personalidades con distintos polos que tornan complejo conformar un plan homogéneo que pueda ser exhibido. Por el tenor de sus actores elegidos, más que aceptado sigue siendo rechazado socialmente”.
OUTSIDER POLITICO
Por otro lado, Pirillo consideró que “un inexperto Javier Milei, inspirado en el partido político español “VOX” fundado por Francisco Abascal Conde, que ataca con dureza y por igual el sistema gubernamental, la justicia, los sindicatos, la denominada casta política, la empresaria y, por sobre todo, al Estado, acapara la atención de muchos. El escenario no deja de ser propicio para nuevas figuras y este último es una de ellas; la hoy denominada oposición argentina (exageradamente patética en su mayoría) tiene una mediocre propuesta que gira en tener que votar a un tal ´Colo´ por el solo hecho de ser pelirrojo o a un exiguo neurólogo que parecía sumar más de lo que restó. Así Milei, con un libreto antiguo calcado de economistas como Friedrich Hayek, Milton Friedman, Anna Schwartz, Irving Fisher y otros afamados monetaristas que brillaron en la década del 50/60 y que en 1970 supieron captar adeptos bajo estos principios reaccionarios a ultranza, pudo llegar a crear en su momento el llamado “Partido Libertario”, es decir nada nuevo ni moderno”.
“Monstruos injustos y pendencieros como Ronald Reagan y Margaret Thatcher, enemigos bélicos de la Argentina en la guerra de Malvinas, fueron adeptos a esta corriente que tanto sufrimiento aportaron a gran parte de la humanidad. De todas formas -agrega Pirillo- por participar en este decadente y corrompido sistema vigente el nuevo arcaico hombre ya forma parte del actual odiado staff político. El art. 3 de la carta orgánica del Banco Central exhibe como finalidad promover en la medida de sus facultades y en el marco de las políticas establecidas por el gobierno nacional, la estabilidad monetaria y financiera, el empleo y el desarrollo económico con equidad social; en sí, eso es lo que ataca Milei o los que están detrás suyo para decir que el Banco Central debe ser dinamitado”.
Finalmente, el sindicalista municipal enfatizó que «los empresarios más poderosos de la Argentina, un club de tránsfugas que se hicieron archimillonarios con las leyes laborales vigentes y que almorzaron el martes con el presidente Alberto Fernández, con Sergio Massa y con Juan Manzur -paradójicamente en el salón “Eva Peron”, abanderada de los humildes- exigieron flexibilización y actualización de la ley laboral, el final de la doble indemnización y terminar con la prohibición de despedir trabajadores pudiéndolo hacer a discreción y sin miramientos bajo el lema de que poder despedir trabajadores permite generar más empleo”.
Para Pirillo, «la elección está más que complicada, el escenario nacional no ayuda y los 19.000 millones de dólares que vencen para pagar al FMI en 2022 condiciona todo esfuerzo y hasta el mejor de los programas que, por otro lado no existe porque solo hay anuncios de meras aspiraciones de deseo que nunca se concretan».
«Esta complacencia con el mundo empresarial con medidas pro empleo privado y genuino arroja como resultado que esta vez el movimiento obrero, los delegados de base y las comisiones internas, prescindibles e inconsultos, no tendrán ninguna responsabilidad económica sobre las duras jornadas postelectorales que vendrán en la Argentina. Los actores que hasta acá decidieron al parecer tienen su futuro tristemente sellado”, concluyó Pirillo.
