Trabajadores enrolados en la Unión de Recibidores de Granos y Anexos de la República Argentina (URGARA), paralizaron la actividad granaria en 16 puertos de todo el país, en reclamo de una recomposición salarial y cambios en el Convenio Colectivo de Trabajo (CCT).
La protesta, que duró 24 horas, tuvo “un alto acatamiento”, según confió el titular del gremio, Pablo Palacio, quien aprovechó la ocasión para cuestionar a los empresarios de la Cámara de Puertos Privados Comerciales (CPPC) por culparlos de la falta del ingreso de divisas.
“Los empresarios utilizan la excusa del ingreso de dólares de manera infantil, buscando distraer la atención de los argentinos, y con una actitud temeraria e irresponsable culpan a los trabajadores por los costos económicos del paro, dejando en claro su ambición y avidez de rentabilidad en desmedro de los intereses de nuestro país”, sostuvo Palacio.
Y advirtió: “El continuo retraso para la liquidar dólares muestra una grave insensibilidad frente a la cual el Gobierno debería tomar cartas en el asunto para que se termine la especulación empresaria en base a mentiras que crean incertidumbre económica y confusión”, denunció el titular de URGARA.
Mañana, a las 15, habrá una reunión clave entre las partes en el Ministerio de Trabajo para tratar de encontrar respuestas a los pedidos y solucionar las necesidades de los trabajadores.
“Ratificamos que no vamos a renunciar a nuestro reclamo de mejoras en el poder adquisitivo e insistiremos en la reducción de la jornada laboral, que es algo que venimos pidiendo hace ya mucho tiempo a un sector que hoy está en un año récord de exportaciones y que puede dar respuestas para que haya empleo para todos”, adelantó Palacio.
